Mejores prácticas para la gestión de auditoría interna

Cuando se realiza una auditoría de los sistemas, procedimientos y operaciones de gestión de auditoría interna de una organización, lo que se espera conseguir son resultados fiables y precisos. Aunque la gestión de la auditoría interna puede conllevar procesos y procedimientos complejos, no por ello tiene que ser complicada ni estresante.

Para que su organización pueda sacar el máximo partido a la auditoría interna debe tener implementadas normas y procedimientos. ¿Pero cómo puede generar los resultados que necesita para tomar decisiones fundamentadas?

Estas mejores prácticas pueden ayudarle a mejorar la gestión de la auditoría interna y, al mismo tiempo, asegurarse de conseguir precisión y fiabilidad en los resultados. Además, aprenderá cómo simplificar el proceso de forma que pueda ahorrar tiempo y dinero.

¿Qué es la gestión de la auditoría interna?

La gestión de la auditoría interna es el proceso por el que se desarrolla y ejecuta un programa de auditoría interna. Implica evaluar riesgos, identificar áreas de mejora, gestionar recursos y mejorar la eficiencia de los sistemas de control interno.

Su gerente de auditoría interna deberá evaluar la eficacia de los procesos de gestión y recomendar medidas correctoras cuando sea necesario. Asimismo, evaluará los resultados, preparará un informe de auditoría del sistema de gestión interna y trabajará con los auditores en la toma de medidas adecuadas para abordar cualquier riesgo o debilidad que se identifique.

En general, la gestión de la auditoría interna lleva su proceso de gobernanza al siguiente nivel, además de proporcionar una garantía objetiva. Sin supervisión ni regulación, su organización probablemente experimentaría más problemas operativos y financieros que aquellas que cuentan con un sólido programa de gestión de auditoría interna.

Mejores prácticas para gestionar auditorías internas

Gestionar correctamente el proceso de auditoría puede ser complicado. Requiere una sólida comprensión de los riesgos asociados a su negocio, un plan eficaz para evaluar dichos riesgos y una comunicación clara entre todas las partes implicadas en el proceso.

Al seguir las mejores prácticas para la gestión de auditorías internas puede agilizar su proceso y garantizar precisión en los resultados.

1. Reserve tiempo para planificar la auditoría

Se suele decir que la preparación es la clave del éxito. Y así es, sin duda, en la gestión de la auditoría interna.

Antes de llevar a cabo la auditoría, necesita tener un plan implementado. Esto incluye establecer objetivos y expectativas claros para la auditoría y configurar un cronograma para todo el proceso. También debería determinar quién será el responsable de cada tarea dentro de la auditoría y en qué medida lo será.

Las auditorías también deben incluir una exhaustiva evaluación de riesgos de forma que sepa qué áreas requieren más atención. Esto informará del alcance de sus proyectos de auditoría y determinará el tiempo y los recursos asignados a cada etapa.

2. Establezca normas para su proceso de auditoría interna

Para garantizar precisión, fiabilidad y coherencia necesitará normas y procedimientos claros de auditoría interna; estos podrían incluir directrices para llevar a cabo entrevistas, realizar comprobaciones de antecedentes, inspeccionar documentos y documentar evidencia.

Estas normas ayudan a mantener la integridad de todo el proceso de auditoría y proporcionan una forma coherente de medir resultados. Además, pueden ayudar a garantizar que todas las partes interesadas se hagan responsables de sus actos.

Su proceso de auditoría interna también debe incluir un sistema de controles y equilibrios para verificar la precisión e integridad en cada etapa, como pueda ser que un auditor tercero revise los resultados o realizar revisiones independientes de cada etapa del proceso.

3. Invierta en la tecnología y el software de gestión de auditoría interna adecuados

El software y la tecnología pueden ser fantásticos activos en el proceso de auditoría interna. Desde la gestión de riesgos automatizada a la recopilación de evidencias, hay numerosas herramientas disponibles para ayudarle a optimizar sus procesos.

Invertir en la tecnología adecuada también puede significar menos trabajo manual para los auditores. Esto puede reducir costosos errores y eliminar tareas que llevan mucho tiempo y son de menor importancia.

Al seleccionar la tecnología, busque herramientas que sean fáciles de usar, basadas en la nube, seguras y compatibles con sus sistemas actuales. Asimismo, asegúrese de comprender la política de soporte del vendedor en caso de que se produzca cualquier problema técnico.

4. Haga seguimiento de las medidas de corrección de auditoría

Independientemente de lo bien que gestione su proceso de auditoría interna, no será correcto si no hace un seguimiento de cualquier medida correctora identificada. Cuando se detecta un problema es fundamental supervisar el progreso de cualquier medida y verla completada de manera oportuna.

Esto puede conllevar la creación de informes de auditoría para llevar seguimiento del progreso, programar reuniones de seguimiento con las partes interesadas y documentar los resultados de cualquier medida correctora que se haya tomado. Hacerlo le ayudará a garantizar que cualquier problema identificado se aborde adecuadamente y que los niveles de riesgo se han reducido.

5. No se olvide del cumplimiento de la normativa

La auditoría interna debe realizarse de acuerdo a las normas del sector y los reglamentos aplicables. Esto incluye tener actualizados con regularidad todos los documentos de auditoría y documentar cualquier cambio en el proceso o las políticas. Las auditorías externas también pueden requerirse en ciertas organizaciones.

Además, es importante estar informado de nuevas leyes, reglamentos y directrices que pudieran afectar a su proceso de auditoría interno. Hacerlo le ayudará a mantener un sistema conforme a la normativa y asegurarse de que sus auditorías cumplan los estándares más rigurosos.

Al seguir estas mejores prácticas para la gestión de la auditoría interna puede tener la seguridad de que sus auditorías serán eficaces, eficientes y conformes a la normativa. Esto puede ayudar a reducir los niveles de riesgo y garantizar que todas las partes interesadas se adhieran a las normas de desempeño más eficaces. Cuando establece normas claras e invierte en las herramientas adecuadas, puede asegurarse de que su proceso de auditoría interna es el correcto.

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La gestión de auditoría es una parte esencial de cualquier proceso de auditoría interna. Con los recursos adecuados, sus auditorías serán eficientes, eficaces y precisas.

La solución de gestión de auditoría de Caseware proporciona herramientas para agilizar sus procesos y mejorar el cumplimiento con la normativa. Ayuda a automatizar tareas tediosas como la creación de hojas de registro de horas o la gestión de relaciones con los clientes, permitiendo a su equipo de auditoría disponer de más tiempo para centrarse en hacer crecer su negocio.

Además, con las herramientas integradas de evaluación de riesgos, siempre irá un paso por delante de cualquier problema potencial. Cuando se enfrente a riesgos, podrá reducir costes, aumentar la rentabilidad y proteger su organización de posibles responsabilidades.

Con los informes temáticos y los datos en tiempo real sobre cómo va desempeñándose su empresa, podrá tomar decisiones fundamentadas y poner en marcha acciones mensurables para mejorar los resultados. Asimismo, podrá acceder en cualquier momento a información del encargo, tal como la rentabilidad del personal, las entregas o la utilización del presupuesto, para tomar medidas en el momento oportuno. Obtenga más información hoy mismo.